Enfoque: acción de enfocar, poner el foco en/ sobre…
Empezamos el año y nuestro entorno, próximo y lejano, esta bastante removido, incluso convulso. Y nosotros, cada uno de nosotros, usted ¿como estamos, como esta?
Todos estos focos de inestabilidad global nos afectan bastante más de lo que quisiéramos reconocer.
Por si fuera poco seguramente usted se ha hecho, como todos nosotros, algún buen propósito para este año nuevo. Estos añaden todavía mas presión a la ya existente. No es de extrañar pues que nuestro nivel de estrés negativo no baje.
Quizás nos vendría bien, muy bien; buscar, encontrar y practicar un «nuevo» tipo de enfoque. Ya he escrito y hablado muchas veces sobre la conveniencia de adoptar puntos de vista diferentes más coherentes y razonables.
Hoy me centraré pues en algo que podríamos llamar:
«La enseñanza del pensamiento negativo»
Enseguida me explicaré, ya que no quiero que me malinterpreten.
De seguro que no estoy hablando de obcecarse con ideas, emociones y pensamientos malsanos, ni de creer obsesivamente que todo aquello que hacemos resultará en negativo. No, más bien al contrario.
Todos, yo mismo, insistimos sobre la conveniencia de pensar y enfocar en positivo. Todos los libros de autoayuda hablan de ello. Sin embargo muy a menudo este enfocar en positivo conlleva una actitud casi pasiva, como si fuese suficiente el hecho de pensar en positivo para que lo que deseamos se cumpliese. Incluso en algunas personas esto se transforma casi en resignación, conduciéndoles a la inacción, o por lo menos a NO HACER TODO LO NECESARIO PARA QUE EL OBJETIVO DESEADO SE REALICE CON GARANTIAS DE ÉXITO.
Lo que les quiero proponer hoy es utilizar «la fuerza del pensamiento negativo».
¿Cómo practicarlo?
En vez de quedarme gozoso con el pensamiento positivo, creyendo que ya he hecho TODO lo necesario, creyéndome suficientemente preparado y listo para afrontar lo que sea menester; el nuevo enfoque consiste en:
¡ Imaginar el peor de los escenarios posibles (¿que pasaría en una situación determinada que usted debe afrontar si TODO fallase?) y, acto seguido, buscar soluciones a fin de evitar que esto suceda !
Enfrentar cualquier situación real en la que usted deba estar, imaginando todo lo que podría salir mal, de forma anticipada y buscando remedio y solución a todos y cada uno de los posibles problemas que se podrían dar en el peor de los casos, le ayudarán a estar cada vez más preparado para resolver posibles contingencias.
Como ven, no se trata de ser catastrofista ni negativo; sino de prever, anticipar y resolver por adelantado los posibles problemas (deseando, claro esta, que no se produzcan) a fin de estar lo más preparado posible en el caso de que se produjeran.
Si el tema a resolver es complejo, cuanto más sofisticado y / o tecnificado sea, más habrá que repasar una y otra vez los posibles errores o fallos que se pueden dar. Imaginando incluso que pueden haber fallos en cadena, encadenándose unos a otros. Repetir, más cuanto más complicado sea el tema, nos permitirá detectar posibles fallos antes de que se produzcan, encontrarles soluciones y evitarlos.
Esta técnica que les propongo no sólo sirve para grandes problemas, la podemos utilizar a todos los niveles y a pequeña escala.
Para los buenos deseos de año nuevo por ejemplo: si nos hemos propuesto ir al gimnasio cada día (imagino el peor escenario: falta de tiempo, de ganas, cansancio, mal tiempo, etc.) ¿que hacer? Pues replantear quizá el deseo ¿tengo realmente ganas de hacerlo? Si es que si podríamos contemplar otra periodicidad más ligera: quizás una o dos veces por semana.
Sea cual sea la complejidad analizada, el hecho de aplicar «la fuerza del pensamiento negativo» al análisis y Imaginar el peor de los escenarios posibles ya sea de manera individual o colectiva permite aumentar la propia capacitación y competencia haciéndonos cada vez más capaces de resolver en situaciones reales los problemas que se puedan presentar.
En el análisis colectivo esto se complementa con el necesario retorno o feedback.
Aceptando que el análisis, incluso la crítica del otro NO son ataques personales, sino magnificas oportunidades de crecimiento y aprendizaje.
¡Cuanto más competentes y capaces seamos MÁS garantías de éxito tendremos!
Vemos pues que Imaginar el peor de los escenarios posibles, lejos de llevarnos a la negatividad ¡ nos conduce al ÉXITO !




