Generalmente casi todos entendemos el diálogo como un medio para llegar a un entendimiento con otros.
Suponemos que tanto uno mismo como los interlocutores tienen y tenemos la finalidad, el objetivo y la sincera intención de comunicarnos, de compartir puntos de vista, tal vez diferentes, y sobretodo de entendernos.
¿Pero realmente es así? ¿Tenemos sinceramente esta loable intención?
¿Que significa en la práctica, más allá de una «buena» declaración de intenciones, querer realmente el diálogo?
- Significa tener una disposición de ánimo conciliadora y dialogante.
- También indica disponer de una manera de hacer, de estar y sobre todo de ser humilde, sin creerse estar imbuido de «La Verdad Absoluta».
- Asimismo nos dice que es necesario buscar, encontrar y mantener una actitud serena, con una gestualidad (en el tono, en la voz, en las formas, en la expresión general, etc.) calmada y no «ofensiva».
- Significa ser respetuoso con la diversidad en todos sus aspectos, en todos los planos: razas, religiones, creencias, orientaciones sexuales, opciones políticas, lenguas, sistemas educacionales, valores morales de todo tipo, etcétera.
- Todo lo anterior siempre, siempre, esta claro, desde la libre aceptación y la NO imposición.
- Nos habla del respeto profundo hacia el otro, que No es «el enemigo», ni tan siquiera «el adversario» o el antagonista.
- El otro se convierte así en el «dialogante», el partícipe en una misma búsqueda conjunta del entendimiento, el colaborador necesario e imprescindible en el encuentro de soluciones, de consenso…
- Respeto que se manifiesta en la aceptación plena de todas las diversidades, y con la tolerancia absoluta al derecho que tiene el otro a discrepar pacíficamente de mis planteamientos.
- Derecho que yo No «doy», sino que es un derecho inalienable adquirido del otro.
- Derechos fundamentales establecidos desde mucho tiempo atrás en La Declaración Universal de los Derechos Humanos.
- Derechos reflejados en la mayoría de las Constituciones de Todos los países democráticos, aunque por desgracia no de manera total en nuestro planeta.
- Con palabras surgidas de las «nuevas tendencias» en «Crecimiento Personal» podríamos hablar de: lenguaje positivo, de escucha activa, de ser proactivo, de tener resiliencia, de …
- Así pues nos habla de Derechos, de respeto… pero sobretodo nos habla de una manera de hacer, de una forma de interactuar con el otro, de una ACTITUD y de una ¡Voluntad de Entendimiento!
- ACTITUD y Voluntad de Entendimiento que quizás podemos tener como disposición natural genéticamente adquirida, pero que será sobretodo el fruto de un trabajo serio, disciplinado y constante con uno mismo.
Es pues «algo» que podemos fomentar, desarrollar y potenciar con una práctica seria y honesta con y sobre uno mismo.
Sobre nuestra tendencia «normal», que no natural, a la intolerancia, al fanatismo, a la estrechez de puntos de vista, a la idea de que aquello que yo digo o creo es «lo mejor» (en definitiva: las limitaciones ).
Con una mirada atenta y respetuosa sobre mí mismo, poniendo toda la Intención y toda la Atención en todo lo que manifiesto cuando interactúo con el otro sean cuales sean las circunstancias o el objeto de «diálogo» (de nuevo: las propias limitaciones) .
«Algo» que requiere de nuestra Voluntad firme y sincera de dialogar.
¡Quedan todos ustedes formalmente invitados al diálogo!



