Enfocar: ¡cambiar el enfoque, el punto de vista!

¿Que es un «punto de vista»?

Una perspectiva, una forma (personal e intransferible) de ver algo, lo que llamamos la realidad. Este enfoque evidentemente es único ya que corresponde únicamente a la propia percepción.

Pondré un ejemplo práctico que hará mas corta mi explicación: imagine que usted (junto con otras cinco personas) está mirando una caja como las que envuelven cualquier producto industrial que haya comprado. Consta de seis lados diferentes con diversos dibujos y explicaciones en cada una de las seis caras.

Cada uno de ustedes explica lo que ve desde su punto de vista (su lado). ¿Que sucederá? Que cada uno dará una versión diferente, correspondiente a su visión de la caja, ya que cada cuál ve un lado diferente. Y aunque los seis mirasen el mismo lado la versión sería ligeramente diferente, ya que no pueden estar todos mirando desde el mismo punto de mira.

Si esto sucede observando un objeto físico, ¿que pasará cuando lo que queramos mirar, observar y después ver sea algo más subjetivo (un plan de empresa, una situación, unas decisiones tácticas o estratégicas, etc.)?

• Evidentemente todos miraremos el mismo tema.
• Algunos observaremos y/o observarán lo mismo, otros algo divergente y otros aún mirarán aspectos que nosotros ni nos planteábamos.
• Finalmente otro grupo veremos/verán algo completamente diferente o incluso opuesto al resto de participantes. 

Nuestra mirada, nuestra observación y nuestra manera de ver la realidad esta completamente teñida, condicionada por las propias maneras de percibir lo que nos rodea. Los propios patrones de pensamiento y conducta aprendidos a lo largo de la vida (familia, sistema educativo, medios informativos, sociedad) condicionan/ hacen que todo lo que observamos/ vemos sea percibido de forma totalmente personal e intransferible, única.

Así, ¿cómo podremos ponernos de acuerdo, si ni tan siquiera «vemos» lo mismo?

¿Cómo podremos compartir opiniones, si no hablamos de lo mismo?

¿Cómo podremos diseñar estrategias conjuntas, si partimos de enfoques completamente diferentes?

Generalmente, además, solemos pensar que «mi punto de vista» es el único que existe. Y, si pensamos que pueden coexistir otros, además del propio, el mío es el único válido o, por lo menos, el mejor.

¿Que podríamos compartir entonces?

Es evidente que con estos preámbulos no podremos llegar muy lejos.

¡Nos es necesario pues cambiar el enfoque, el punto de vista para poder compartir el mismo punto de partida y, de manera compartida, tomar las mejores decisiones conjuntas!

Por eso necesitamos «desenfocar» las viejas pautas de conducta y trabajar para erradicar, o por lo menos minimizar, los condicionantes negativos y limitadores «aprendidos».

Dejar de estar limitado deviene pues, ahora en tiempo de crisis, y siempre, una necesidad urgente.

Para hacerlo necesitamos Enfocar, cambiar el enfoque, el punto de vista ayudados por otras herramientas que hasta ahora no dominábamos.

Necesitamos Buscar, Encontrar y Asumir herramientas prácticas de funcionamiento conjunto, coordinado y eficaces que nos llevarán a desarrollar una manera de estar, de hacer y de Ser más adecuada con los «nuevos tiempos».

Unos tiempos que requieren mentalidades abiertas y participativas, liderazgo y organización menos «vertical», humildad y aprendizaje constante, capacidad de empatía y de ser resolutivo, resiliencia: capacidad de resistir los contratiempos, etc.

En definitiva Talento: capacidad de buscar metas razonables y de movilizar todos los recursos necesarios y disponibles para alcanzarlas. Capacidad de tener miedo (ver los riesgos) y sin inconsciencia (no calcularlos), no quedarse paralizado (inoperante) y ¡Actuar!